jueves, 13 de diciembre de 2012

INTRODUCCIÓN



En los últimos tiempos hemos podido ser testigos directos de una revolución, ya no en las aulas, sino en el alumnado. La sociedad del conocimiento ha proporcionado a los alumnos nuevas formas de acercarse a la educación, nuevos valores en los que apoyarse. No obstante, las aulas no siempre han sido un reflejo fiel de una sociedad en constante cambio. En muchas ocasiones, los sistemas educativos actuales son hijos de la revolución industrial y las teorías económicas del Siglo XIX (Robinson), lo que hace muy difícil la adecuación a las nuevas circunstancias. Afortunadamente, las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación se han erigido como una respuesta eficaz a este problema. Obviamente, las tecnologías "per se" no son eficaces, y necesitan una labor constante y activa por parte del profesorado.
Si bien es muy cierto todo lo anterior, tampoco se puede bombardear al alumnado con nuevas tecnologías, ya que la mayoría de las aulas no están adaptadas a ello. Si estamos trabajando en clase con un libro el 80% del tiempo, no podemos esperar  que ocupen su tiempo fuera del aula sólo con nuestra asignatura. Por tanto, deberíamos establecer un cambio de paradigma (como tantos profesionales claman ya) buscando un enfoque realmente comunicativo, pero sin olvidar la base de gramática que les haga inferir lo que desconocen.

Algunas características de las TICs que pueden impulsar este cambio de paradigma son:


  • Son imprescindibles e ineludibles para el futuro, no se puede escapar a ellas.
  • Fomentan el control sobre la información ya que, entre otras cosas, puedes volver a ella en cualquier momento. 
  • Fomentan la reflexión a través de la lengua escrita. Hay estudios representativos que proponen una diferenciación entre lengua oral y escrita, basándose en el énfasis de la última en reflexión acerca de lo que se escribe. Para ellos, la lengua escrita tendría lo bueno de las dos.
  • Hay un menor temor a expresarse que en la lengua oral. Todos somos conscientes de la barrera que suponen los filtros afectivos en una clase de idiomas extranjeros. Con el uso de las TICs en el aula, estos problemas desaparecen casi por completo, ya que el estudiante puede elaborar su discurso detenidamente y analizarlo paso por paso antes de comunicarlo. Además, hay estudios científicos que proponen que hay mayor sinceridad a través de las tecnologías; parece ser que la alteridad es un elemento importante a la hora de vencer las barreras psicológicas que separan al profesor del alumno e incluso al alumno del alumno.
  • Pueden usarse junto a multitud de herramientas para que vean la lengua en su contexto, como por ejemplo:

  1. Corpus: Si les enseñamos a usar estas herramientas (aunque no sea en profundidad) les podemos ofrecer nuevas vías de conocer cómo se usan palabras o frases en distintos contextos.
  2. Chat: A través del chat pueden interactuar tanto con sus propios compañeros como con gente nativa. Herramientas como kakaotalk o messenger son un ejemplo representativo.